La insulina es una hormona producida en el páncreas, un órgano dentro del abdomen. Si su hijo tiene diabetes tipo 1, no fabrica insulina. Su hijo se tendrá que dar inyecciones de insulina. La insulina no se puede tomar en forma de píldora, porque el ácido estomacal la destruye.
Si su hijo tiene diabetes tipo 2, es posible que fabrique insulina, pero no en suficiente cantidad. En ese caso, puede tomar píldoras para ayudarle a fabricar más insulina o para utilizar mejor la insulina que está fabricando.
Su hijo necesita el tipo correcto de insulina en los momentos adecuados del día. La cantidad y el tipo de insulina que utilice son muy importantes. Si su hijo recibe demasiada insulina o lo hace en el momento equivocado, podría tener una reacción grave por los bajos niveles de azúcar en la sangre. Si su hijo no tiene suficiente insulina, el cuerpo no será capaz de utilizar los alimentos para obtener energía y el nivel de azúcar en la sangre será demasiado alto.
Cuando tiene diabetes tipo 1, no tiene células que fabrican insulina. Cuando come, su cuerpo convierte la comida en azúcar. El azúcar se transporta a través de la sangre. La insulina ayuda a que el cuerpo convierta el azúcar en energía. El nivel de azúcar en la sangre sube y baja durante el día.
El cuerpo fabrica naturalmente la cantidad correcta de insulina para transportar el azúcar a las células, donde se quemará en forma de energía. Sin insulina, su cuerpo no puede convertir azúcar en energía. Si no hay insulina, el azúcar se acumula en la sangre y después pasa a la orina.
Hay tres tipos principales de insulina:
El profesional médico de su hijo le puede recetar una combinación de los distintos tipos de insulina de acuerdo a su horario de comida y estilo de vida.
Si tiene alguna duda, consulte con su profesional médico o farmacéutico para obtener más información. Es importante que acuda a todas las citas para realizar pruebas o examinarse en el consultorio.